Los bloques o ladrillos de barro son elementos de construcción ecológicos, fabricados a base de arcilla natural cocida. Se destacan por su capacidad térmica, resistencia estructural y bajo impacto ambiental. Ideales para muros, fachadas o elementos decorativos, aportan una estética cálida y rústica muy valorada en arquitectura sostenible. Su forma y tamaño permiten una instalación eficiente y un acabado final que no requiere revestimientos adicionales.